La última flecha es un libro escrito por Erwin McManus, de origen salvadoreño, empresario, líder de pensamiento cultural, y fundador de MOSAIC, una comunidad de fe en Los Ángeles, California. Conocida por su innovación, creatividad y habilidad artística, MOSAIC ha sido designada una de las iglesias más influyentes e innovadoras de América. Erwin posee un bachillerato en psicología de University of North Carolina en Chapel Hill, una maestría en Divinidad de Southwestern Theological Seminary, y un doctorado en Letras y Humanidades de Southeastern University.
La última flecha está basado en el relato bíblico de 2 Reyes 13:14-20 en dónde el profeta Eliseo le reprocha al Rey Joás el hecho de sólo haber golpeado unas tres veces las saetas contra el suelo y no haberlo hecho más veces. Por medio de este texto, el autor nos lleva a reflexionar sobre la vida, dejando enseñanzas profundas para el área familiar, laboral, ministerial, hasta los sueños y objetivos personales. Remarca el hecho de que solo tenemos una saeta (vida) y de que si logramos aquello que Dios tiene para nuestras vidas o no, dependerá de las veces que lo intentemos (los golpes contra el suelo), nos salga bien o mal, dándolo todo, sin guardarnos nada.
El pastor McManus narra testimonios personales de cómo él entendió este principio de insistir en todo lo que uno sueña y en lo que Dios ha preparado para nuestras vidas. Desde padecer una enfermedad al momento de comenzar a escribir este libro, como superar la mala relación con su padre desde que era pequeño, también hubo otros momentos que le tocó atravesar en lo familiar y ministerial, como así también sueños que Dios le cumplió.
Personalmente me gustó este libro porque soy de la idea de no darme por vencido, de que a pesar de que las cosas no salgan como uno quiere, se debe seguir luchando por los sueños, metas y objetivos. Tenemos que darlo todo por el plan y el propósito de Dios en nuestras vidas, y no “llegar a nuestros últimos días”, como dice McManus, y reprocharnos que no luchamos y no insistimos por lo que Dios tenía para nuestras vidas.
Por supuesto, el autor también marca que tenemos que aprender a distinguir si cada oportunidad que se nos presenta proviene de Dios o no. Y eso siempre es un desafío, que podamos estar alineados siempre a los planes y propósitos de nuestro Señor Jesús para cada uno de nosotros.
Si eres de los arriesgados, de los que no se guardan nada, de los que lo dan todo por Jesús, este libro es para ti. Y si no lo eres hasta el momento, anímate, utiliza bien las flechas que tienes en tu mano.